¿Te aprietan demasiado las zapatillas? A veces puede ocurrir que compres unas zapatillas de correr que te aprietan demasiado los pies. En este caso, la única opción es cambiarlas o ensancharlas para que se ajusten a tus pies. Si no quieres equivocarte, aquí tienes algunos consejos para elegir la talla correcta de tus zapatillas de correr.
Este inconveniente es aún más común para las personas que tienen una suela ancha porque, a menudo, las zapatillas se ajustan bien en la longitud, pero quedan apretadas en los dedos y en la planta del pie. En este caso, hay que tomar medidas para ensanchar las zapatillas de correr para que se ajusten mejor a los pies anchos.
Afortunadamente, hay muchas formas sencillas y seguras de ensanchar las zapatillas de correr para que se ajusten a tus pies. Aquí tienes las cinco mejores:
- Compra las zapatillas a última hora de la tarde.
- Sustituye las plantillas.
- Utiliza un secador de pelo y calcetines gruesos.
- Congela tus zapatos, en el verdadero sentido de la palabra.
- Utiliza una camilla para zapatos.
5 métodos para ensanchar las zapatillas de correr si tienes los pies anchos
1. Comprar zapatillas a última hora de la tarde
Es mejor evitar comprar zapatillas de correr por la mañana o a primera hora de la tarde. El mejor momento para comprarlas es a última hora de la tarde o por la noche. ¿La razón? Los pies tienden a hincharse e hincharse a medida que avanza el día.
Como los pies son más pequeños por la mañana, corres el riesgo de comprar un par de zapatos que no se ajusten a tu talla. El mismo par que te queda bien por la mañana puede apretarte demasiado por la noche.
Por lo tanto, la regla general es comprar siempre los zapatos a última hora de la tarde o por la noche. En caso de que tengas que comprarlos por la mañana, te recomendamos que lleves un par de calcetines gruesos antes de probarte los zapatos.
2. Sustitución de plantillas
Puede sorprenderte, pero quitar las plantillas crea más espacio dentro del zapato. Si no quieres quitar las plantillas por completo, sustitúyelas por otras más finas para conseguir el mismo beneficio.
Los mismos zapatos, con el espacio recuperado, se ajustarán mejor a tus pies anchos.
Este método es seguro porque no altera en modo alguno la parte superior de la zapatilla.
3. Usar un secador de pelo con calcetines gruesos
El calor desempeña un papel importante a la hora de aflojar las fibras de la parte superior, estirando las zapatillas y haciendo que se ajusten mejor a tus pies anchos. Sin embargo, la exposición prolongada a una fuente de calor excesiva puede dañar el empeine.
Por tanto, evita calentar el calzado sobre una llama directa, como una vela o una chimenea.
Por estas razones, te recomendamos que utilices un secador de pelo. El aire es lo suficientemente caliente como para estirar tus zapatillas, pero no demasiado como para causar daños. Éste es el procedimiento a seguir:
- Ponte las zapatillas.
- Con un secador de pelo, sopla aire caliente en la zona de los dedos.
- No soples demasiado aire en una sola zona de los zapatos. Sigue moviendo las manos balanceando el secador sobre los zapatos.
- Repetir esto durante unos minutos a lo largo de 3-5 días debería ser suficiente para estirar las zapatillas de correr hasta el tamaño deseado.
- Bonificación: si puedes llevar un par de calcetines gruesos durante el proceso, el resultado final mejorará considerablemente.
4. Zapatillas congeladoras
No, no tienes que torturar tus zapatillas sumergiéndolas en agua y metiéndolas después en un congelador durante días. Lo que te sugerimos es que aproveches una de las propiedades del agua para estirar tus zapatillas de correr.
En efecto, el agua se dilata ligeramente cuando pasa del estado líquido al sólido. Para ensanchar tus zapatillas de correr, aprovecharás precisamente esta propiedad. He aquí cómo hacerlo:
- Coge un par de bolsas ziplock.
- Llénalas de agua hasta el borde.
- Cierra las bolsas zip-lock.
- Mete dentro los sobres con zapatos.
- Deja el par de zapatos en el congelador durante toda la noche con las bolsas introducidas.
- A la mañana siguiente, las zapatillas estarán mucho más sueltas que la noche anterior.
- Puedes repetir este proceso un par de veces para ensanchar tus zapatillas de correr hasta la talla deseada.
5. Utiliza un ensanchador de zapatillas
El uso de un ensanchador de zapatillas para ensanchar las zapatillas de correr para pies anchos es una de las soluciones más «profesionales». Este método tiene un porcentaje de éxito muy alto y además no causa ningún daño a las zapatillas. Los ensanchadores de zapatillas están hechos para reproducir la forma de un par de zapatillas típico. Por lo tanto, ayudan a ensanchar las zapatillas sin causar cambios estructurales ni dañar el modelo.
F.A.Q
¿Cómo puedo ajustar los cordones de mis zapatillas para mayor comodidad?
Ajustar correctamente los cordones puede marcar una gran diferencia en la comodidad de tus zapatillas. Experimenta con diferentes técnicas de atado para encontrar el ajuste perfecto que evite puntos de presión y molestias.
¿Las plantillas personalizadas pueden mejorar la comodidad de mis zapatillas de correr?
Sí, las plantillas personalizadas pueden proporcionar un soporte adicional y mejorar la comodidad al correr. Consulta a un podólogo o especialista en calzado deportivo para obtener plantillas adaptadas a tus necesidades específicas.
¿Debería considerar cambiar la plantilla original de mis zapatillas?
Si experimentas molestias o problemas de confort con la plantilla original de tus zapatillas, cambiarla por una plantilla de mejor calidad o más acolchada puede ser una solución efectiva. Busca plantillas que se ajusten bien y proporcionen el soporte adecuado para tus pies.
¿Cómo puedo evitar las ampollas y rozaduras al correr largas distancias?
Para evitar ampollas y rozaduras, asegúrate de usar calcetines adecuados que absorban la humedad y reduzcan la fricción. Además, asegúrate de que tus zapatillas estén bien ajustadas y no haya movimiento excesivo dentro de ellas mientras corres.
¿Hay algún producto o accesorio que pueda ayudar a mejorar la comodidad de mis zapatillas?
Sí, existen productos como sprays lubricantes para reducir la fricción, almohadillas de gel para puntos de presión y protectores de talón para evitar que el calzado roce la piel. Experimenta con diferentes accesorios para encontrar los que mejor se adapten a tus necesidades.
