La elección de cuándo correr, si por la mañana o por la tarde, representa una dilema común entre los corredores, sobre todo para los que empiezan a correr y buscan consejos útiles. No existe una regla universal sobre cuál es el mejor momento para entrenar, ya que hay muchas variables que pueden influir en la elección, como la disponibilidad de tiempo, el horario, la seguridad, el metabolismo y el tipo de entrenamiento que se desea realizar. Por lo tanto, no es tanto el tiempo lo que marca la diferencia, sino más bien la respuesta de nuestro organismo al que siempre hay que poner en las mejores condiciones de entrenamiento.
Sin embargo, es cierto que hay algunos diferencias entre correr por la mañana y correr por la tarde. Por ejemplo, la temperatura y las condiciones meteorológicas pueden ser diferentes, lo que afecta al rendimiento durante el entrenamiento. Por la mañana, el tiempo suele ser más fresco, mientras que por la tarde la temperatura puede ser más alta. Además, entrenar por la mañana puede aumentar la energía para el resto del día y dar una sensación de satisfacción por haber completado ya el ejercicio, mientras que entrenar por la tarde puede ayudar a liberar el estrés acumulado durante el día y tener un sueño más reparador.
Por tanto, si estás decidiendo cuándo hacer ejercicio hoy, ten en cuenta estos factores y valora cuál es el mejor momento para ti, en función de tus necesidades y de las respuestas de tu cuerpo. No hay una respuesta universal pero lo importante es entrenar siempre al máximo de tus posibilidades para alcanzar tus objetivos.

Correr por la noche: beneficios y contraindicaciones
Correr por la noche tiene varios pros y contras, aquí los tienes:
PROS:
- Liberación de la estrés: Después de un largo día de trabajo o estudio, correr por la noche puede ayudar a liberar el estrés acumulado y a relajarse.
- Temperatura más fresco: durante los meses más cálidos, correr por la tarde puede ser una mejor opción que hacerlo durante el día, cuando la temperatura es más alta y el sol más fuerte.
- Mayor flexibilidad de tiempo: Si tienes un horario de trabajo o de estudios exigente, correr por la tarde puede ser la única opción disponible para ti.
EN CONTRA:
- Dificultades en conciliar el sueño: Para algunas personas, entrenar por la noche puede interferir con el sueño, ya que el cuerpo puede estar demasiado activo para dormirse inmediatamente después del ejercicio.
- Menos energía: Al final del día, puedes sentirte más cansado y tener menos energía para correr que por la mañana.
- Seguridad: En algunas zonas, correr por la noche puede suponer mayores riesgos para la seguridad personal, ya que la visibilidad puede ser menor y puede haber menos gente alrededor.
En general, correr por la noche puede ser una opción ventajosa para quienes tienen un horario de trabajo exigente o desean liberar el estrés acumulado durante el día. Sin embargo, debes prestar atención a las señales de tu cuerpo y elegir el mejor momento según tus necesidades y tu seguridad personal. En cualquier caso, lo importante es entrenar constantemente y con compromiso para alcanzar tus objetivos.
Correr por la mañana: por qué debes hacerlo o evitarlo
Correr por la mañana temprano tiene varios pros y contras, aquí los tienes:
PROS:
- Más energía durante el día: correr por la mañana puede ayudarte a aumentar tu energía durante el resto del día, ya que incrementa la producción de endorfinas, sustancias químicas cerebrales que provocan una sensación de euforia.
- Sensación de realización: Correr temprano por la mañana puede hacerte sentir satisfecho por haber completado ya tu ejercicio, y esto puede tener un impacto positivo en tu estado de ánimo durante el resto del día.
- Temperatura plus cool: Durante los meses más cálidos, correr por la mañana puede ser una mejor opción que hacerlo durante el día, cuando la temperatura es más alta y el sol más fuerte.
EN CONTRA:
- Dificultad para despertar: Para algunas personas, levantarse temprano para correr puede resultar difícil, sobre todo si no eres una persona madrugadora.
- Riesgos para la salud: si nunca has corrido antes, empezar a hacerlo por la mañana temprano puede ser un riesgo para tu salud, ya que tu cuerpo puede no estar aún preparado para el esfuerzo físico.
- Falta de tiempo: Si tienes un horario de trabajo o de estudios muy apretado, puede que no tengas tiempo suficiente para correr a primera hora de la mañana.
En general, correr temprano por la mañana puede tener muchos beneficios para tu salud mental y física, pero depende de tus necesidades y hábitos. Si decides hacerlo, es importante que prestes atención a las señales de tu cuerpo y empieces gradualmente para evitar lesiones.
F.A.Q
¿Cuáles son los beneficios de correr por la noche?
Correr por la noche puede ayudarte a relajarte después de un día estresante, mejorar la calidad del sueño y evitar el calor extremo. También puede ser una buena manera de mantener una rutina de ejercicios cuando el tiempo es limitado durante el día.
¿Cuáles son los contras de correr por la noche?
Correr por la noche puede presentar riesgos como la disminución de la visibilidad, mayor riesgo de lesiones, y posibles preocupaciones de seguridad. Es importante tomar precauciones adecuadas para mitigar estos riesgos.
¿Cómo puedo correr de manera segura por la noche?
Usa ropa reflectante, lleva una linterna o luz frontal, corre en áreas bien iluminadas y conocidas, y si es posible, corre con un compañero. Siempre lleva un teléfono móvil y avisa a alguien de tu ruta y horario.
¿Correr por la noche afecta la calidad del sueño?
Para muchas personas, correr por la noche puede mejorar la calidad del sueño al reducir el estrés y la ansiedad. Sin embargo, es importante no correr demasiado cerca de la hora de acostarse para evitar que la actividad física interfiera con la capacidad de conciliar el sueño.
¿Es mejor correr por la mañana o por la noche?
La mejor hora para correr depende de tus preferencias personales y horarios. Ambos momentos tienen sus beneficios únicos, y lo más importante es encontrar una rutina que se adapte a tu estilo de vida y que puedas mantener de manera constante.